Selección de poemas de
Ludwig Saavedra
II
A los editores del Zoo.
La natural consumición de los editores es
Decantarse en papeles y cartulinas de lujo
exquisitas fuentes de letra
y Más ná:
Me da asco
y escupo sobre su más bella edición
Sobre las letras doradas con que escribieron sus nombres
junto a los de snobs de tercera categoría e interesados varios en pervertir el flujo del amor
Aquí todos piden fama/cama
un poco de esplendente maldición que los mitigue
en odres de cristal
que los fermente en metáforas engrampadas
toboganes por donde deslizar la mente
hacia un pavimento sin polvo sin sangre sin miedo
solo piden pleitesía y dinero
)Creo que yo podría vivir con el amor
de unos cuantos árboles y plantas
como la ganjah o el naranjo(
Incluso sin poesía podría vivir yo
¿es acaso poesía sonreír y despertar de la sonrisa como quien despierta de un sueño?
¿es acaso poesía enamorarse de una puta purísima?
¿es acaso poesía acicalar mi ego con serpentinas de color smog?
¿ es acaso poesía curar un trauma?
¿ y si el vuelo enaltecido resulta ser un juego de Realidad virtual?
La poesía es una revelación
A veces la revelación consiste en que no hay revelación
Tu corazón es un diamante de sangre
Tu corazón es un peque peque fuera de borda
Tu corazón no sabe echar raíz no sabe ser no sabe ser más que tu corazón sin corazón
Tu corazón se perdió corriendo en los arenales de los pueblos jóvenes de la ciudad
Jugó una pichangita con los niños que saben de poesía
de hambre y maltrato
Tu corazón se volvió un arma y se bajó al guardia del Canon Literario
Se lo bajó de un tiro entre los ojos donde dicen está el tercer ojo
(los niños que pichangeaban han corrido ávidos a beber su sangre)
Tu corazón ha rodado con tu corazón por escaleras de faro
Ha recolectado cálidos frutos en las mañanas con nubes de luz adhesiva
Pliegos y pliegos de nubes raudas
Como flores que bailan un pogo
Kali yuga blues
Tu corazón no olvida no sabe no deja no se deslíe no se envanece no se desvanece
Es indeleble
como un íkaro.
III
Cuando cantas tango soy feliz
los instantes que dura tu canto
La simetría del dolor nos abraza
proyectando quedamente
Un árbol
que hunde sus raíces en el fuego
en el viento
Y si cantas reggae mi corazón es reggae
Recuerdo la playa El Silencio
donde vendí sanguches y también libros
bajo el sol que reía a carcajadas no sé porqué
Surrealismo: vender libros bajo el sol en la playa
La tristeza de los ambulantes cuando no venden
es una ola laaaaaaaaaaaaaaarga que no se acaba y no se acaba
Realismo: durante el año nuevo vendimos sanguches
en la playa atestada de campistas
y a las doce nos abrazamos entre miles de fuegos artificiales
Otras veces hemos tenido que esquivar a la policía municipal
que nos quita la merca
nos saquea hasta el ímpetu
Ataviados de sudor y de esperanza Frágiles armas
Pero guerreando.
IV
Aquí has de venir con tus horas de interminable altura proyección de punto vernal
Has de venir a la sombra de estas palmeras
para remediar los cauces sin fin remediar la estática en la tormenta que domesticaste
con migajas de ácido y caricias de cocaína
Vendrás como Anfitrite cubierta de efímeras joyas de espuma marina relumbrando al sol
desnuda de ira me dirás he vuelto me quedaré contigo un verano podremos ver acampar a las estrellas en noches que serán dichosas porque solo son dichosas las cosas que se dicen de mentira como la poesía
y luego estaré esperando el camión que me lleve en autostop al Sur
lo esperaré a las polvorientas afueras de Arica
donde el desierto tiene miles de voces
y el Sur es solo una canción que hemos escuchado atentamente
cuando soñábamos
Pero tengo una certeza
en ella me deslizo por parajes de hielo sonrisas de helechos
grutas de sutras jirones de cuarzo y cúpulas de manos enlazadas que giran con dirección a donde han partido tenuemente los tonos acres del Apu
Cuánto tiempo he de esperar que se acabe el tiempo-Maya
Ningún tiempo he de esperar Maya se disuelve
no-tiempo
con simples gotas de lluvia
en el río
Ucayali nocturno.
V
Cuando el lenguaje es batiscafo
en la realidad
profundamente
Cuando sabemos que no hay tal cosa como la realidad
y aun así…
Sein, das verstanden wenndern kann, ist sprache.
Wovon man nicht sprechen kann, darüber muB man schweigen
La complejidad de nuestras encrucijadas queda posada en barrer la choza
El acelerador de adrones en columpiar a un niño
Haikus
Haikus
Haikus
El vértigo es velamiento y espesa la intuición
Witz de lo cotidiano
Respuesta del koam:
lo concreto y sencillo
todo el misterio ahí la iluminación
En lugar de descarrilar hacia las lunas envuelto en jaeces de niebla:
C e s a c i ó n
Añoro dos o tres palabras
que retraten lo fugaz y cambiante de la naturaleza de este y todos los universos
y no cientos de palabras trip
-dijo Hokusai.
Ludwig Saavedra Tarazona (Lima, Perú, 1985). Nació en Lima, pero su primera infancia la pasó a orillas del Río Huallaga en Juanjui, San Martín de Porras, en la Selva. Creció luego en Chorrillos, donde el mar era una presencia perenne que todo lo abarcaba. Mar y música. Obtuvo un reconocimiento en la publicación Prima Fermata Literaria el año 2004, año que ingresó a la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, a la Facultad de Letras, a la escuela de Literatura.
Ha publicado dos plaquettes de poesía con el sello editorial Paracaídas editores: Florece y El mar de vinilo ( 2009 y 2013 respectivamente). Poemas suyos aparecen en diversas revistas literarias y blogs. Ha organizado y participado en recitales llevados a cabo en diversos espacios de la ciudad de Lima. Ha participado en la Jornadas anuales de literatura los años 2005 y 2012, así como en diversos festivales de poesía como el Enero en la Palabra del Cusco (2013), o el Cielo abierto de Barranca (2012). Recientemente ha publicado Los arrecifes (2014), conjunto de poemas, en edición cartonera con el sello Amaru Cartonera. Participa en el Festival iberoamericano de poesía Poquita fe de Santiago de Chile, así como diversos recitales en Santiago en la facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile; y en el Primer Encuentro Mundial de editoriales Cartoneras. Participa en el V Festival de Poesía de Lima. Luego de esta experiencia se hace editor cartonero, convencido que el reciclaje y la autogestión son el camino más acorde con su fluir. Así participa de la experiencia editorial cuzqueña Kunnin Munna con la plaquette Hartado de sonidos ( 2014), recorriendo y participando en las Ferias del libro del Cusco, Arequipa y Juliaca, así como en el Festival de poesía Tea party 3, en Arica. Enero en la palabra 2016, Cusco.
Edita Obayareti, revista cartonera de poesía mundial, cuyo primer número cuenta con colaboraciones de Latinoamérica. Prepara un quinto volumen de poemas.