Selección de poemas de
Priscilla Cajales
EL DENIS, 6 DE AGOSTO DEL 93
Se llamaba Denis y tenía 12 años, estudiante del colegio Galvarino 282 en la calle Venancia Leiva en La Pintana. Tenía 39 compañeros de curso, aproximadamente 8 profesores en distintas asignaturas y tres hermanos. La mañana del martes 6 de agosto del 93 lo encontraron colgando en el baño de su casa. Una carta decía que se arrepentía de haber gastado la plata del gas, que lo perdonaran y que no quería hacer sufrir a su mamá. Yo no la pude leer, pero en el velorio al que fuimos algunos compañeros de curso la mamá contaba repetidamente lo de la carta. Nosotros hicimos guardia los dos días que duró el funeral, nos pusimos el uniforme del colegio con guantes y calcetas blancas. Solo recuerdo de él su estatura, era pequeño y tenía las manos gordas. Jugábamos en el patio del colegio, siempre llevaba encima un sobre de jugo rojo en polvo, se echaba un poco en la mano y se lo comía. Nunca supe en qué se gastó la plata, calculo que debieron ser unos ocho mil quinientos pesos. El día del funeral pasó por fuera del colegio y todos salimos con pañuelos blancos a ver la fila de autos que seguía un cajón negro cubierto de flores.
LA PIZARRO CANTANDO
Lo que ocurre, dijo, por dar un ejemplo, es como una mujer
que va sentada en la última corrida de asientos en la micro que va a 120
por avenida España
cantando las canciones de la Pizarro que el conductor lleva a todo volumen
se las sabe de memoria, y canta fuerte mirando por la ventana del bus
los demás pasajeros miran hacia adelante,
yo me concentro en los anuncios de publicidad
y en el hilo en la boca de ella
mezcla de saliva y mostaza.
REALISMO I
Te acuerdas de Hans?
Las paredes nunca han sido más áridas que en ese lugar
y durante ese verano
Las calles nunca más estrechas y los grifos más furiosos
Te acuerdas entonces de Hans?
Y del vestido de novia destrozado para sacar girones de tela
Los cintillos del NO, el parque O`higgins para vender los cintillos
pintados con témpera
Pollo con papas fritas y bilz tibia, una caja con mercadería,
la plata de las ventas.
Un viaje en micro que duró una hora y media
Te acuerdas entonces de Hans?
Nosotros nos entreteníamos pintándonos los dedos de colores Nosotros nos pintábamos la nariz con témpera
Y el pavimento a nuestra altura ardía
y veíamos como un espejismo, de lejos.
Priscilla Cajales. Licenciada en Literatura Hispanoamericana en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Chile. Fue becaria de la fundación Pablo Neruda y participante del taller de dicha fundación durante el año 2006. Actualmente forma parte del proyecto editorial “Hebra” en Valparaíso, Chile.